
El Síndrome del Intestino Irritable, conocido coloquialmente como Colon Irritable, es una patología muy común que cursa con alteraciones y molestias intestinales que puede interferir negativamente en la calidad de vida del paciente. Hoy te ayudamos a abordar esta patología y a conocerla más de cerca.
¿Qué es el Síndrome del Intestino Irritable?
El Síndrome del Intestino Irritable (SII), también llamado Colon Irritable, es un trastorno funcional del tracto gastrointestinal que afecta especialmente al intestino grueso.
El SII causa molestias en el paciente que lo sufre, estas pueden ser de mayor o menor intensidad y duración, haciendo que el bienestar y calidad de vida del paciente pueda verse disminuida, llegando incluso a, en algunos casos, limitar el desarrollo de las actividades de la rutina diaria.
Causas del Intestino Irritable
Aún no se tiene conocimiento de la causa exacta que origina el SII, pero si se tienen indicios y asociaciones de factores que pueden hacer que aparezca y se desarrolle. Estas son algunas de las causas del colon irritable:
- Alteración de la motilidad intestinal: esto puede originar episodios de diarrea o de estreñimiento, o bien, la combinación de estos. Pudiendo aparecer otros síntomas en paralelo.
- Desequilibrio de la microbiota intestinal: La alteración del equilibrio de la microbiota o flora intestinal (desequilibrio llamado disbiosis) juega un papel fundamental en esta patología. Te contamos su importancia a lo largo del presente artículo.
- Estrés y estado anímico: el estrés y las emociones pueden desencadenar sus síntomas o producir brote o recurrencia.
- Cambios en la dieta del paciente: En ocasiones, alterar las cantidades o tipo de alimentos de forma puntual o mantenida en el tiempo, pueden originar brote.
- Hábitos de vida no saludables como la mala alimentación, consumo de tabaco o alcohol, falta de ejercicio físico, estrés...
- Factores genéticos y ambientales: puede existir predisposición genética y condicionantes ambientales.
Síntomas del Colon Irritable
Los síntomas asociados al SII pueden ser episodios agudos o brotes que, si no se cuidan, pueden llegar a volverse recurrentes y crónicos. Los síntomas del Intestino Irritable son:
- Dolor, malestar o espasmos abdominales que suelen desaparecer tras la defecación.
- Hinchazón del abdomen y sensación de plenitud.
- Mocos en heces, que pueden aparecer en algunos pacientes.
- Cambios en los hábitos intestinales, originando episodios de diarrea o estreñimiento.
- Gases.
Estos síntomas, aparentemente livianos, pueden llegar a ser muy molestos e, incluso, limitantes para el paciente y el desempeño de sus tareas diarias y vida personal.
Factores que influyen en el Colon Irritable
La microbiota o flora intestinal en el SII
El Síndrome del Intestino Irritable se encuentra influenciado por una compleja interacción del sistema digestivo, el sistema nervioso y la microbiota intestinal.
La microbiota intestinal está formada por microorganismos vivos de diferentes tipos (cepas) que se encuentran manteniendo el equilibrio y hacen que todo funcione correctamente. En el momento en que esta población se altera, se desequilibra, es lo que se conoce como disbiosis de la microbiota intestinal. Este desequilibrio, desencadena los síntomas característicos del SII:
- Se altera la fermentación intestinal; esto supone que se produzcan más de lo normal gases y origine distensión abdominal.
- Se producen menos ácidos grasos de cadena corta, no siendo el efecto antiinflamatorio de estos suficiente para mantener la integridad de la mucosa intestinal.
- Se altera la respuesta inmune, desencadenando inflamación intestinal.
Eje intestino-cerebro en el Colon Irritable
Consiste en la comunicación existente entre el cerebro e intestino a través del sistema nervioso entérico ("cerebro del intestino") y el cerebro. Una alteración de la microbiota en un lugar puede influir en la del otro, produciendo desequilibrios y alteraciones.
El estrés emocional puede activar el sistema nervioso autónomo, alterando la motilidad intestinal; esto puede desencadenar episodios de diarrea o de estreñimiento. Además, el estrés y el desequilibrio emocional pueden alterar la microbiota intestinal y producir disbiosis.
La importancia de los hábitos saludables
El estilo y los hábitos de vida juegan un papel fundamental en el colon irritable, por lo que es importante conocer qué factores pueden afectarlo y cómo podemos controlarlos:
- Manejo del estrés: mediante técnicas de relajación, terapia psicológica, practicar actividades que nos gusten y relajen, etc.
-
Equilibrio dietético: Manteniendo una dieta no solo sana y equilibrada, sino también alejándonos y limitando el consumo de fritos, salsas, especias, bebidas carbonatadas, alcohol, cafeína, grasas... Evitar los atracones, comidas copiosas y mantener una dieta lineal, pueden ayudar a controlar y mejorar los síntomas. Al igual que incluir alimentos ricos en fibra soluble como avena, zanahorias y manzanas.
- Hidratación adecuada: especialmente en aquellos pacientes en los que SII cursa mayoritariamente con episodios de estreñimiento.
- Incluir probióticos en nuestra alimentación: puede ser muy útil en el manejo del SII, así mantendremos la microbiota intestinal en equilibrio. Debe tenerse en cuenta que no todos los probióticos son iguales ni todas las patologías intestinales presentan el mismo desequilibrio de población microbiana de la flora intestinal, por ello, en este tipo de pacientes resultan interesantes las cepas de Lactobacillus y Bifidobacterium.
- Ejercicio físico regular: ayuda a manejar el estrés y mejorar la motilidad intestinal.
Tratamientos para el Síndrome del Intestino Irritable
Desde la consulta médica, el especialista debe hacer un seguimiento y control del SII, pudiendo recetar diferentes tipos de medicamentos que ayuden a mejorar los síntomas. Estos pueden ser:
- Antiespasmódicos: utilizados para aliviar el dolor y cólicos abdominales, regulando así la frecuencia y consistencia de las deposiciones. Un ejemplo puede ser la mebeverina.
- Laxantes y fármacos para el estreñimiento: como los laxantes osmóticos.
- Antidiarreicos: como loperamida, que solo se recomienda utilizarlo de forma puntual y excepcional, no de forma recurrente.
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Aboca Colilen IBS
Complemento alimenticio destinado a disminuir el dolor de barriga frecuente, hinchazón, diarrea y estreñimiento.
Estas pastillas para el intestino inflamado pueden tomarlo adultos y niños a partir de los 8 años, también mujeres embarazadas y en período de lactancia.
Se toman 2 cápsulas 3 veces al día: antes del desayuno, antes del almuerzo y antes de la cena. Puede prolongarse su toma de 2 a 6 semanas, según la intensidad del brote.
Solgar Advanced Acidophilus Plus
Probiótico con cepas de L. acidophilus y B. lactis. Este probiótico para el colon irritable ayudará a mantener el equilibrio de la flora intestinal, mejorando y disminuyendo los síntomas, espaciando los brotes.
Pueden tomarlo los adultos. Se toman 1 o 2 cápsulas al día, preferentemente, con alguna comida.
Pranarôm Digest Confort
Complemento alimenticio que contribuye al bienestar digestivo gracias a su composición rica en aceites esenciales como la menta piperita, el jengibre o la achicoria.
Pueden tomarlo adultos y niños a partir de los 6 años. De 6 a 12 años chupar o masticar 1 comprimido, de 1 a 3 veces al día, antes o después de las comidas. A partir de los 12 años chupar o masticar 1 o 2 comprimidos, de 1 a 3 veces al día, antes o después de las comidas.
El Colon Irritable en la actualidad
El Síndrome del Intestino Irritable afecta a una proporción significativa de la población mundial y en nuestro país. Concretamente, en el mundo, entre un 10-15% de la población mundial lo padece y en España 8 de cada 100 personas han sido diagnosticadas con él.
Debe tenerse en cuenta que muchas personas no saben que sufren este síndrome, experimentan síntomas, pero no acuden al médico. También, los criterios de los métodos de diagnóstico pueden variar de un lugar a otro. Además, el diagnóstico es complicado y necesita de múltiples pruebas que descarten diferentes situaciones, afecciones o patologías hasta determinar que se trata realmente del Síndrome del Intestino Irritable.
No olvides que, siempre que los síntomas persistan, empeoren o varíen, debes consultar con tu médico. Es crucial el diagnóstico para el tratamiento y control de la patología, así el paciente podrá mejorar su bienestar y calidad de vida.