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El aceite de masaje con árnica Weleda es una completa combinación de aceites esenciales analgésicos y relajantes, que ayudan a tener una mejor circulación. Usado típicamente durante la terapia de masaje como una forma de disminuir la tensión muscular y el dolor.
El aceite de masaje con árnica Weleda es un aceite del que se han extraído los principios activos de la planta de árnica mediante un proceso de maceración. Es utilizado en la medicina natural gracias a sus efectos terapéuticos, antiinflamatorios y para el tratamiento del dolor producido por caídas, magulladuras o esguinces.
El árnica es una planta de flor muy atractiva, que tiene excelentes beneficios para la salud. A nivel circulatorio, se ha utilizado durante siglos en Europa y Asia. Este aceite de Weleda es un suplemento natural y se puede utilizar para aliviar y sanar diversas molestias.
Es una especie de planta semejante a la manzanilla que se emplea en la práctica casera, gracias a sus propiedades medicinales. Tiene una vida de más de dos años, cuyo tallo no es de madera, muy sensible y que también tiene propiedades medicinales.
A lo largo del tiempo, se ha ido evolucionando y su cultivo se realiza en zonas cálidas, lejos del frío, conservando así sus cualidades medicinales, de las que se obtiene el aceite de árnica.
El aceite de árnica se extrae de la maceración de las flores de esta magnífica planta con grandes propiedades antiinflamatorias y activadoras de la circulación. Está indicado para calmar los dolores musculares y articulares.
El aceite de masaje con árnica Weleda es un excelente antiinflamatorio y estimulador de la circulación. Este aceite está recomendado para aliviar los músculos doloridos o la inflamación que puede provocar una torcedura, un desgarro, un moretón o un dolor articular.
Además, ayuda a la cicatrización y es antioxidante, ya que estimula la reparación de los tejidos protegiéndolos del envejecimiento.
Masajear la parte del cuerpo que necesite alivio de la tensión muscular o de los dolores. Se recomienda aplicarlo de 2 a 3 veces al día, según las necesidades. Manténgalo lejos de las áreas sensibles y evite ingerirlo.
El árnica puede provocar alérgias si se aplica prolongadamente en pieles sensibles. No lo use sobre la piel dañada o con lesiones abiertas. Se debe aplicar siempre sobre la piel y no sobre otras partes del cuerpo. El aceite de árnica es solo de uso externo, por lo que no debe ser ingerido.
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