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Avent vaso de aprendizaje es ideal para que el bebé entrene su motricidad y favorecer su desarrollo, tanto mental como físico. Es de gran utilidad cuando el niño está empezando a dejar el biberón y empezando a ser más autónomo.
Es un vaso de aprendizaje de Avent que incorpora una pajita y que evita los derrames involuntarios. Su diseño revisado por odontólogos permite que los niños ejerciten y fortalezcan la musculatura de la boca y la mandíbula.
Este vaso es ligero y su forma anatómica y puntos en relieve sobre la superfice permiten que el niño lo agarre de manera cómoda y segura. Los materiales de fabricación son de excelente calidad y lo hacen resistente a impactos y caídas al suelo.
Al optar por la utilización de este accesorio para la alimentación infantil, se está cuidando la salud de los más pequeños, puesto que es fácil de desmontar para limpiarlo en profundidad. Esto permite que los residuos que estimulan la proliferación de bacterias y hongos, y que ocasionan infecciones estomacales, puedan ser eliminados adecuadamente.
La pajita incorporada en el vaso Avent tiene una válvula antigoteo que previene los derrames. La tapa puede abatirse para evitar los vertidos involuntarios cuando el bebé se desplaza. La parte baja de la pajita tiene forma curva para que el líquido pueda beberse fácilmente y en una posición natural.
Los especialistas recomiendan que los niños empiecen a tomar líquidos en el vaso de aprendizaje de Avent de manera experimental a partir de los 8 meses. A partir del año ya pueden beber directamente del vaso de entrenamiento. Por otra parte, los vasos con este sistema estimulan la madurez de la lengua para que los bebés mejoren la calidad de los sonidos que emiten.
La utilización de estos vasitos les procura mayor independencia y les permite adaptarse con rapidez a una nueva manera de tomar los alimentos. Estos vasos son adecuados para consumir bebidas frías o calientes como leche, agua o zumos.
El uso de este vaso está indicado para bebés que están empezando a dejar el biberón, a partir de los 12 meses.
Llenar el vaso con la bebida teniendo precaución de lavarlo cuidadosamente antes y después de cada uso. Tapar muy bien y dársel al bebé para que empieza a tomar la bebida por si mismo.
El uso de este vaso de aprendizaje no es apto para niños menores de 12 meses de edad. Tampoco es conveniente que los niños jueguen, corran o caminen con el vaso en la mano.
Goma de silicona y prolipropileno.