Nuestro sistema circulatorio es el encargado de llevar la sangre a las células. Pero el sedentarismo, los malos hábitos, las hormonas o la herencia genética, pueden deteriorarlo. La actividad física y una alimentación saludable, vigorizan el corazón y todo el sistema circulatorio ayudando a reactivar la circulación sanguínea de nuestro cuerpo.
Castaño de Indias: Contiene diversos principios activos como saponinas y taninos. Por sus flavonoides se ha utilizado tradicionalmente como tónico venoso o vasoprotector que consigue disminuir la viscosidad de la sangre, volviéndola más líquida, reduciendo el tiempo de sedimentación provocando una descongestión de los vasos sanguíneos y aumentando la resistencia capilar.
Ruscus, Meliloto y Vid Roja: La sinergia de estas tres plantas favorecen la contracción de las células musculares de los vasos sanguíneos, facilitando el retorno venoso de la sangre acumulada en las piernas hacia el corazón. Son plantas ricas en saponinas y taninos con acción vasoconstrictora y antiinflamatoria. Aumentan la resistencia de los capilares, produciendo una vasoconstricción, disminuyendo la permeabilidad y reduciendo la retención de líquidos, particularmente en los tejidos de la pared venosa.
Bioflavonoides Rutina y Herperidina: la Rutina reduce los edemas en los pacientes con insuficiencia venosa crónica, también ayuda a reducir la fragilidad capilar y a disminuir la retención de líquidos en las extremidades inferiores. Por otra parte, la Hesperidina mejora la insuficiencia venosa crónica y disminuyen su hinchazón.
